Traducción:
(Narró) ‘Isa Ibn As-Sariî: Le dije a Abû Ya‘far (el Imam Al-Bâqir, con él sea la paz): “Háblame respecto a aquello sobre lo cual están cimentados los pilares del Islam, de forma que si me aferro a ello mi accionar se purifique y no me perjudique ignorar lo que ignoro”.
Dijo: “El testimonio de que no hay divinidad más que Dios, y que Muhammad es el Mensajero de Dios; reconocer lo que ha llegado de parte de Dios, y la obligación del zakât contenida en las riquezas; reconocer la wilâiah (hegemonía) con la cual Dios dispuso la wilâiah de la familia de Muhammad (BP). Dijo el Mensajero de Dios (BP): “Quien muere sin conocer a su Imam ha muerto la muerte de (la Época de) la Ignorancia”. Dijo Dios: «Obedeced a Dios, obedeced al Mensajero y a los dotados de autoridad entre vosotros» (An-Nisâ’; 4:59). Ello se verificaba en ‘Alî, que las bendiciones de Dios sean sobre él, luego después de él en Al-Hasan, luego de él en Al-Husain, luego de él en ‘Alî ibn Al-Husain, luego de él en Muhammad Ibn ‘Alî, y así será el asunto, que por cierto que la Tierra no poseerá rectitud sino a través de un Imam, y quien muere sin conocer a su Imam ha muerto la muerte de (Época de) la Ignorancia”.[I]